Hace ya bastante tiempo que quería subir al ovni a tomar un café, en realidad no es nada económico pero las vistas merecen la pena. Las vistas son increibles y la manera es pagar la subida que depende de si vas por tu cuenta o con una agencia de rutas por Eslovaquia puede salir más o menos caro. El coste por la visita puede ascender hasta 6.50€, por lo que se va con agencia y en un grupito de 2 o 3 personas puede salir algo más barato.
Una vez que subes al ascensor por uno de los pilares, te encontrarás con el hall del restaurante, en el cual para poder comer es solo bajo reserva, pero en mi caso solo quería ir al bar a tomar un cafelito, así que no había problema.
De todas maneras aún no era el momento, por lo que seguimos subiendo un par de tramos de escaleras más que nos llevarían a todo lo alto de la construcción del puente. Las vistas…
Desde arriba se puede ver practicamente toda la ciudad, esta orientación es hacia el este, hacia el otro lado queda el barrio de Petrzalka uno de los barrios más nuevos y para mi gusto saturado de edificios altos y muy coloridos en Bratislava.
En la foto se puede ver de izquierda a derecha el barrio de Carlova Ves, el Parlamento junto al Castillo de Bratislava, al fondo la torre de la televisión, el puente del Ovni junto a la catedral, el puerto, etc… Como digo, gran parte de la ciudad antigua y nueva se puede sacar en esta fotografía.
Pero como no podía ser de otro modo y cumpliendo mi deseo, terminamos tomándonos el ansiado café. Este en realidad era un capuccino ya que la forma de preparar el café no me gusta, pero como este es el más parecido a lo que mi paladar tiene en su recuerdo, es lo que suelo pedirme. No quiero imaginar lo que puede costar cenar en este restaurante de «tal altura», pero el café nos costó 2.50€ por lo que ya que si estás arriba, abonar ese pico de más por dilatar y disfrutar un poco más de las vistas bajo la protección del cristal merece la pena y mucho (sobre todo por el temblar del suelo).
